El consumo de carne es parte indispensable de la agenda gastronómica de una gran parte de la población española. Situada en el centro del debate durante las últimas semanas, la apuesta por el consumo de carne de calidad es un elemento clave de la cultura gastronómica e histórica de nuestro país. La carne de calidad es parte de la dieta mediterránea. Es uno de los principales avales de nuestro país, por derecho propio.
Pedir un plato de carne elaborada a la parrilla de carbón o degustar un cuarto de lechal asado o cochinillo asado en horno de leña de encina en un restaurante de San Lorenzo de El Escorial o en un establecimiento hostelero de El Escorial, localidades con mucho sabor de la Sierra de Guadarrama, en Madrid, es un hábito saludable que además, permite conocer a fondo una cocina con siglos de historia y hacerlo, además, en un entorno espectacular, a escasos metros del Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial si se elige comer en un restaurante de la localidad serrana como es el Asador del Rey.
Calidad de la carne: parte esencial de la dieta mediterránea
La carne forma parte esencial de la dieta mediterránea como alimento fresco y de gran calidad nutricional. Respeta los sabores originales y se constituye como una fuente de proteínas con alto valor ecológico. Este alimento aporta vitaminas B1, B6 y B12 además de minerales como el hierro, el fósforo y el zinc y aminoácidos (moléculas que juegan un papel clave en los procesos biológicos) fácilmente digeribles. El consumo de carne roja mejora la salud del corazón.
IGP Sierra de Guadarrama
En el Asador del Rey apostamos como parte esencial de nuestra filosofía de entender la cocina por la carne de calidad y las elaboraciones tradicionales. Nuestros asados de cordero y cochinillo se elaboran en horno de leña de encina, sin prisa y fieles a la tradición centenaria de los maestros asadores de Castilla. Es allí, donde esta forma de cocina forma parte del acervo cultural. Además, nuestras carnes llevan el sello de la Indicación Geográfica Protegida Sierra de Guadarrama. Una etiqueta que supone un plus de calidad y que refrenda nuestra apuesta por el producto local, de kilómetro cero y potencia nuestros montes y dehesas.
Las carnes IGP Sierra del Guadarrama tienen unas características muy definidas: son carnes de color rojo o rosado, pero nunca oscuro, de aspecto ligeramente húmedo; textura firme, no blanda ni gomosa; con aroma y sabor a carne y con la grasa jugando un papel clave en el mantenimiento de la textura, la jugosidad y el sabor.
Por tanto, estamos hablando de una carne de extraordinaria calidad. Extraída del ganado que pasta en la Sierra de Guadarrama. Y que cumple con todos los criterios para ser un producto clave dentro de una dieta mediterránea equilibrada y saludable.